Lo que habitualmente preguntan las personas a la hora de contratar un desarrollador web son precio y plazo.
Evidentemente cuando alguien piensa así es porque realmente no sabe qué valor aporta una web a su empresa. Una web no es un trámite o algo que simplemente hay que tener. Es una pieza fundamental que debe actuar en sinergia con el resto de la estructura de tu negocio.
Lo que realmente deberías preguntar a la hora de contratar un desarrollador web
- Experiencia
Consultar sobre los proyectos anteriores en los cuales tenga completa responsabilidad de su mantenimiento o de los cuales sea participe. - Conocimientos
Conocer las habilidades básicas del desarrollador. - Calidad
Validar las habilidades del desarrollador para obtener un trabajo de calidad, no algo que simplemente se vea bonito. - ¿Está optimizada para móviles?
Ya más de la mitad del tráfico web se produce desde dispositivos móviles. Si tu desarrollador no te hace una web optimizada para móviles estarás perdiendo más de la mitad de tus posibles clientes. - ¿Es SEO-friendly?
¿Está optimizada para los buscadores? Si no le gustas a Google, la gente no te encontrará. Hoy en día el SEO es algo que hay que tener en cuenta desde la misma concepción de la web. Es decir contenidos pero sobre una estructura eficiente. - ¿Es escalable?
Si tus necesidades cambian, o se incrementan, ¿la web podrá adaptarse fácilmente a esos cambios? ¿O, por el contrario, habrá que volver a empezar de cero con todo lo que ello implica. - ¿Te dará soporte?
Si necesitas un sitio web con frecuentes actualizaciones, tal vez debas pedirle a tu desarrollador un plan de mantenimiento para que se encargue de cuidar tu web y su infraestructura.
Como ves no todo es precio y rapidez. ¿De qué te sirve una web barata y rápida si no va a verse bien desde un móvil o una tablet? ¿O si nadie va a poder encontrarte en Google?