Tienes que posicionar tu marca en la web, si no estás en la red, no existes, sea cual sea tu negocio, tiene que existir en Internet, tener página web es casi una obligación.
La realidad es que la mayoría de las personas consumidoras se informan a través de Internet a la hora de realizar sus compras online. Pero también lo hacen un buen porcentaje antes de comprar en una tienda física. Por eso es tan importante que nuestra marca tenga presencia en la red.
La estrategia es clave para posicionar tu marca en Internet
La web, la página de Facebook y los newsletter son solo herramientas para alcanzar nuestro objetivo. Pero, para que los esfuerzos que invirtamos en la presencia digital de nuestra empresa den su fruto, es imprescindible plantearse una estrategia digital.
Para empezar, la estrategia de comunicación y marketing digital debe estar integrada en el plan de marketing de la empresa. Es decir, las acciones que llevemos a cabo a través de Internet son una forma más de alcanzar los objetivos de nuestra entidad, y deben estar coordinadas con el resto.
¿Cómo crear una estrategia de markteting online integral y coherente?
Para posicionar tu marca en la web, lo que hagamos debe formar parte de un todo con sentido y coherencia. Es decir, nuestra identidad corporativa debe adaptarse al entorno digital: la marca debe ser reconocible tanto en canales offline como online. Es muy recomendable un análisis previo de la situación actual del proyecto, así como un estudio de la competencia.
Definir el público objetivo
Es tan importante determinar las particularidades de cada tipo de público como segmentarlo. Según a quién nos dirijamos, crearemos una estrategia u otra. Definir la audiencia tipo a la que nos orientamos es fundamental para que una estrategia funcione.
Fijar los objetivos
La importancia de esta tarea radica en que, a través de las acciones de marketing y comunicación ayudaremos a nuestro proyecto a conseguir sus objetivos empresariales o de tu organización. A esto nos referimos cuando hablamos de alinear objetivos empresariales con objetivos de marketing.
Tiene que haber una relación directa entre las acciones que diseñemos y los objetivos de nuestra empresa. Es importante definir también el tiempo en el que queremos conseguirlos, además de medir nuestro desempeño. Por eso se menciona con mucha frecuencia que los objetivos deben ser SMART (específicos, medibles, realistas, definidos en el tiempo).
Crear la estrategia y el plan de acción
¿Qué canales se adecúan mejor a esas metas que queremos conseguir? ¿Cómo vamos a llegar mejor con nuestro mensaje a cada uno de esos públicos segmentados? Es el momento de apostar por redes sociales y elegir cuáles, de darle más peso al e-mail marketing, pensar en optimizar la web corporativa o la tienda online. A la hora de crear una estrategia de marketing online lo que tenemos que pensar es en cómo vamos a alcanzar los objetivos.
Fidelizar a nuestro público, llegar a gente nueva, hacer branding, vender más productos de una determinada línea. Según los objetivos que persigamos, actuaremos: de la estrategia extraeremos una hoja de ruta para ponerla en práctica.
En esta línea, es muy importante señalar para cada acción las responsabilidades, las fechas de ejecución y los recursos necesarios.
En el plan de acción incluiremos siempre estos campos:
- Objetivo u objetivos.
- Canal elegido.
- Persona responsable.
- Qué se va a hacer: las acciones.
- Cómo se va a hacer.
- Fecha de ejecución (y de revisión y/o validación de ser necesario).
- KPIs elegidas (indicadores para medir el desempeño).
- Inversión (si aplica, por ejemplo en publicidad).
Ejecutar el plan
Como antes hemos evaluado las necesidades y encontrado la manera de cubrirlas, solo tenemos que poner en marcha el trabajo de los distintos perfiles profesionales elegidos.
Medir los resultados
Es la única forma de saber que lo que hacemos funciona. Medir nuestras acciones y el retorno de la inversión es básico para saber qué cambios son necesarios y también para detectar mejoras.
Hay que definir los indicadores clave de rendimiento, ya en el diseño del plan de acción, porque los objetivos determinarán qué métricas son más relevantes.